martes, 5 de marzo de 2013

ARISTIDES UREÑA RAMOS “CABALGAR FRONTERAS”

“CABALGAR FRONTERAS”
-Laocoonte y sus hijos grupo escultórico griego-
De ARISTIDES UREÑA RAMOS.
"Laocoonte y sus hijos" 

Muchos han sido las obras que han ocupado en el tiempo la función de PATRON UNICO, por ser el inicio a nuevas concepciones, abriendo nuevas fronteras al dialogo artístico.
Estas vienen consideradas Obras Supremas, plasmando a través del tiempo el pensamiento creativo de los hombres, fungiendo como punto referencial de muchas Obras Maestras, así mismo han estimulando en el profundo el ingenio de muchos creadores.
Son muchos los ejemplo que podemos encontrar y que pueda ser  dignas de tales consideraciones, estas  las notamos  en la literatura, las artes visivas, las ciencias, etc., etc., donde muchas Obras Maestras han tomado inspiración y inquietudes de dichas Obras Supremas.
El grupo escultórico griego Laocoonte y sus hijos, es una de las obras más misteriosas, ¡y hay me!, poco conocida por algunos, siendo ella una Obra Suprema, que influencio a muchos artistas desde su primera aparición en el escenario artístico ,desde su realización en el I siglo A. Cristo… hasta llegar al 1506 en pleno Renacimiento Italiano.
Los artista del renacimiento, como también lo fue para el periodo romano, trataron de comprender y descifrar la técnica marmórea con la cual fue construida esta estupenda obra –  que era “a bloque único”-de la manera aérea con la cual se sostiene las articulaciones y sus torcidas figuras en el espacio.
El grande impacto que ella produjo en el Renacimiento fue enorme, y lo curioso es que dicho grupo escultórico  olvidado por aquel hueco histórico por la cual la cultura occidental había pasado llamado “el medio evo” o  “periodo oscurantista”,  apareciendo  a la luz en el pleno renacimiento florentino.
Este complejo escultórico vino descubierto en el 1506, en Roma, sumergida en los viñedos de un tal Felice  de Fredis, aunque si Plinio el Viejo nos narras de haber visto la estatua en el  palacio de Tito y lo define de una belleza tal, de ser preferida a cualquier otra obra artistita, sea esta pictórica que escultórica.
Ella representa al sacerdote troyano Laocoonte y a sus hijos, mientras venían sofocado de dos serpientes mandadas por Athena para impedir de convencer a los troyanos a no introducir dentro de la ciudad el famoso caballo de Troya, colmo de guerreros y dejado como engaño…..un regalo de parte de las tropas grecas en las playas de esa ciudad.
De los autores de esta obra -hay muchas investigaciones en  propósito-  viene atribuido desde un antiguo escrito de Plinio El viejo, a tres escultores de la antigua ciudad de Rodas, del nombre Atenodoro,  Agesandro y Polidoro. (I siglo A.C).
Considerada la obra escultórica en mármol, mas importante del periodo Helenístico y de todo el Arte Griega que la historia nos haya consignado; si tomamos en cuenta que la Estatuaria Griega, está considerada como la máxima manifestación artística de esta disciplina en el mundo y de todos los tiempos, nos damos cuenta de la desproporcionada importancia de este grupo escultórico.
El punto central en el cabalgar las fronteras.
¿Por qué de tanta importancia? , ¿Donde  miraban los artistas, para aprender de esta sublime obra?

La concepción de  “lo estático” en toda la obra escultórica clásica del periodo Helenístico, viene dictada de una armonía de equilibrios y de las reparticiones rítmicas de todos los elementos presentes en una sola obra, es así que esta manera de “lo estático” en verdad venia representada a través del tesón y distensión de la musculatura esculpida, donde la idea sublime que el artista buscaba, era el más alto valor  de la profunda armonía estética, yuxtaponiendo  entre si  la fuerza al reposo, la tensión a la inmovilidad, como quien antepone el blanco al negro…y todo esto representado escultóricamente a través cada detalle conformado de las figuras
 Y la cosa más importante, la capacidad de saber leer en la “geografía” de la obra, la importancia de los acabados escultóricos y la expresión de determinas partes, sin tener a disposición la obra por entera. Por estos motivos existe un público muy especializado, que adquiere a millones de dólares los “torsos” del periodo helenístico, siendo estos un reducido grupo de entendedores capaces de leer la estética de esta sublime disciplina.

Resulta fundamental  también comprender, que el movimiento corpóreo de la figura,  buscan la armonía en el espacio utilizando el gesto mimado,  la rítmica de las siluetas dictaban un estado profundo, que generalmente concordaba con la idea que se iba a representar…. ellas tenían que encastrarse cadenciosamente en el espacio imaginario de las líneas geométricas bases del rectángulo, cuadrado y triangular, como también muchas veces para la composición monumental, desbordaba en la genialidad de controvertir y conjugar dichas geometrías, creando verdaderos teoremas arquitectónico, como lo es para el grupo escultórico del Laocoonte y que aquí podemos observar.
 Es esta la sabiduría que pocos destacados artistas posen, debido a que este es un dono, que requiere una continua atención a lo Académico y al estudio premuroso hacia las Bellas Artes y el arte escultórico de alta expresión.
ARISTIDES UREÑA RAMOS
Florencia Italia febrero 2011

domingo, 3 de marzo de 2013

ARISTIDES UREÑA RAMOS Academia de la dura pasión

-Academia de la dura pasión-
De ARISTIDES UREÑA RAMOS
 

Florencia 5 de Octubre 2012- El mármol, a decir verdad, no es que cueste mucho dinero, lo importante es saber escogerlo, comprender nuestras necesidades y tener conocimiento de las” venas duras” que componen el bloque que estamos analizando, desde ese preciso instante inicia el trabajo del buen escultor.
 La obra que debemos realizar,  esta delineada en nuestra mente, toma forma en la imaginación y busca  el encaje justo en los bloques a disposición, en aquellos que poco a poco logramos observar.
   Me sucede muchas veces, cuando voy a la Cantera de Carrara y Pietrasanta, que al observar un bello bloque, ya de por si trasparente, vidrioso “al punto justo”, escultórico al dulce picar, que (¿?)…me enamoro del bloque, inicio a observarlo y  ver en sus venas marmóreas, los matices de su conformación calcárea, las hipotéticas figuras atrapadas al interno del bloque, esa sensación me dice que ya estoy listo para escoger el bloque del Mármol que iré a esculpir.
Comprar el bloque en la Cantera, no es muy caro, es toda la logística que sigue que hace imposible y costosa tal empresa , trasporte, cargar y descargo, movilización del bloque y proceder a acomodarlo  dentro del Atelier …teniendo en consideración que estamos tratando un bloque de piedra, que puede pesar media tonelada o varias toneladas.
Apenas superados estos problemas logístico, se llega al desafío directo  con la dura piedra marmórea.
LA PRIMERA MARTELADA.
Yo me preparo las garzas y trapos para cubrir las manos, los baños y los dejos empapados  apartados momentáneamente, servirán en el momento de mayor tensión y complicaciones, cuando los dedos, planta de la mano y la apenada muñeca inician a dar señales de abandono y de absoluto dolor.
Pero, sin activar pensamiento alguno, aferro el cincel junto al martillo….y doy inicio a las primeras cinceladas en los rudos contorno de la dura piedra y recogiéndome  en las  largas mangas de las venas calizas…que poco a poco delinean los senderos o guías que tendré que recorrer, esta parte es de fuerza bruta, sangre fría y determinada ejecución….hay que ir sin miedo, con golpes ya probados, seguro en el control del cincel.
De pequeño mi Madre solía, darme la tarea de espulgar el arroz, dentro de una grande batea, pues la maestría de este oficio, necesita de esa misma disciplina, ordenar las fases del trabajo, que van ejecutadas con la parsimonia y delicadez para que podamos cumplir con un buen resultado final….Yo expurgaba  el arroz poniendo una mano de arroz en lado de la batea y poco a poco llevarlo al centro, quitando las imperfecciones de piedras, churús, granos alterados y apenas terminada esa rápida fase, reponerlo al lado contrario, para iniciar otra vez la operación de expurgo.  Así se procede en moldear el duro mármol con parsimonia, delicadez, mano firme y haciendo memoria visiva del trabajo.
Apenas, se termina esta breve, fase…. Se trabaja de compas, tizas negras, tijeras milimétricas en busca de las profundidades que vamos a recorrer y a hacer los hoyos que nos llevaran a la figura escondida……aquí es donde siempre me sucede algo extraño, que siempre he pensado proviene de presencias lejanas.
Uno nunca está solo, cuando esculpe una piedra, hay voces que nos acompañan, que son de nuestros enseñantes, de aquellos que nos han guiado por este camino, de la sabiduría aprendida en los talleres académicos, estas voces  viajan al interno de nuestra mente conformando la certezas a nuestras dudas.
Cuando se esculpe una piedra, hay que recordar que ella se desarrolla a través del quitar material al bloque central, en vez para la técnica del modelaje, como en las disciplina de la cerámica, del barro, de la fusión a metal,  se pone y se agrega el material,…..por eso la técnica escultórica resulta ser la más difícil, ya que una vez quitado erróneamente un pedazo, no hay manera de solucionar eventuales errores, con el resultado fatal del daño al bloque marmóreo.

Así, que la tensión requerida para ejecución escultórico, pretende un esfuerzo que no es solo físico o mental, es una mezcla de sensaciones únicas, dictadas de la experiencia y  de la grande tensión que produce, la conciencia profunda del saber, de la sensibilidad de las energías poseídas y de la presencia segura del conocimiento de la capacidad personal.
   Esculpir en mármol es una escuela de vida, es una academia de duras pasiones, que madura al artista en manera total a través de una la dura disciplina artística. ¡AMEN!